Pensar la práctica clínica. Recursos filosóficos para el psicoanálisis contemporáneo y las psicoterapias humanistas de Donna M Orange.
Editorial Cuatro Vientos, 2012 Santiago Chile. www.cuatrovientos.cl.
Traducción: André Sassenfeld / Francisco Huneus
Comentario Jaime Landa.
Congreso Psicoterapia.Reñaca, agosto 2012
Presentar este libro es presentar a su autora. Me pregunto si habrá diferencia entre lo que se dice y lo que se escribe, si habrá diferencia entre ser en la palabra escrita y ser en la palabra hablada. Ricoeur pensaba que no, sus conferencias, por ello, solo pudieron ser publicadas trás su muerte. Tal vez, ser tanto en el lenguaje como en el acto sea, justamente, el mayor desafío de nuestro tiempo; en ese plural que incluye lo particular en donde se realizara el ser. Seremos, entonces, en aquello que estamos. Durante, estos días hemos escuchado a Donna en sus conferencias y en su conversación en un lenguaje coloquial. En la proximidad del vínculo hemos que constatado que no hay diferencia entre lo que ella dice y lo que ella escribe. Si bien, el libro que hoy estamos conociendo en su traducción al español habla sobre las bases filosóficas que fundamentan la teoría de la práctica psicoterapéutica, lo que nos parece especialmente interesante en sus escritos es la singularidad de su lenguaje filósofico. En sus escritos, sus palabras, en un sentido amplio nos hablan de ella, tal como me imagino sucede en la relación con sus pacientes. Son sus inquietudes, sus preocupaciones, sus intereses, sus ideas las que circulan por sus escritos. Y esto no es fácil. No es fácil mostrar lo que se piensa enraizado a una suerte de entramado de influencias encarnadas en la particularidad de una mirada. Mostrar ese desarrollo de influencias requiere de una cuota de humildad, algo que pienso es parte de su impronta. En lo personal pienso que éste es uno de los desafíos mejor resueltos en el libro.Si nos detenemos a pensar, por un momento, en lo que hacemos al leer la obra de un autor, podemos darnos cuenta que parte de lo que hacemos es escudriñar sus influencias e investigar para reconocer a sus mentores. Indagar, en último término, las fuentes desde donde un autor desarrolla sus ideas. Lo extraordinario es que con Donna este trabajo no es necesario. Es ella la que presenta abiertamente sus fuentes. En “Pensar la Práctica Clínica: Recursos Filosóficos para el Psicoanálisis Contemporáneo y las Psicoterapias Humanistas” nos encontramos con Buber, Wittgenstein, Lévinas, Merleau- Ponty, Gadamer. Sabemos, al leerla como y desde donde están presente sus mentores y como en el camino, la van influenciado. Sabemos como entiende el pensamiento filosófico de cada uno desde su particular modo de pensar. Sabemos que Donna toma su propio camino y no el trayecto que forzosamente habría que tomar en ese recorrido. El libro adquiere, entonces, el tono de un diálogo, sus planteamientos serán preguntas y nuestras reflexiones serán las respuestas que necesitaremos convertir en nuevas preguntas que nos llevaran a otras lecturas y a futuras reflexiones; el libro abre caminos, sorprende, vitaliza tal como sucede en una buena conversación. Sorprende encontrarse con senderos que se bifurcan que nos invitan a transitarlos, senderos impredecibles que ponen en juego la potencia de la que habla Aristóteles, una potencia que no señala dirección, pero que si expande la mente y el horizonte a múltiples posibilidades. El libro es una invitación a pensar, distante del sapere aude Kantiano pero que si lo pensamos tiene algo en común con éste. Si pensamos que al decir pensar aludimos a presentar, a mostrar, a constituir, estamos hablando que pensar es un acto esencialemnte singular. Esta particularidad tiene que ver con el contenido de nuestros pensamientos, así lo que pensamos nos constituye, no como repetición de pensamientos y teorías de algún autor que nos resulte atractivo. Pensar es un ejercicio que permite renovar constantemente aquello que va constituyendo nuestro pensamiento. Sin duda, es difícil establecer un piso estable si sabemos que los pensamientos son siempre móviles y provisorios. Orange señala que “una actitud falibilista nos mantiene flexibles y abiertos a múltiples horizontes de significados emergentes y en expansión”. De alguna forma, lo provisorio de nuestras ideas es lo que nos permitirá expandirnos y estar abiertos a múltiples significados.
Desde otra perspectiva, Donna construye en el libro un escenario y un tono de reflexión sobre la psicoterapia próximo a la filosofía griega en su vertiente Helénico. Nos plantea, fiel a la atmósfera de la filosofía socrática que insiste en que más que el saber importa la experiencia de vida. Una actitud filosófica escasa que no volveremos a encontrar en la historia de la filosofía universal. La muerte de Sócrates asi lo demuestra. Una muerte que esta vinculada a su consecuencia. No en un sentido épico ni trágico. Una muerte vinculada a un sentido ético, a su consecuencia entre lo pensado y lo dicho. Algo similar, a lo que va sucediendo en el espacio terapéutico donde estamos con el paciente no solo con la teoría, estamos también con nuestra convicción ética respecto a lo que sabemos y a lo que decimos. Un saber que no es objetivo ni neutral sobre lo que le ocurre al otro, más bien es un saber del que somos participes. Sabremos de nuestros pacientes en tanto vamos sabiendo de cómo estamos nosotros en esa situación. Se trata, entonces, de un saber situado. Presentar este libro traducido al español es, de alguna manera, recibir a su autora en nuestro idioma, nuestra lengua, recibirla en español, la lengua que habitamos. Es invitarla a recorrer las habitaciones de esta gran morada que constituye nuestra lengua y asi mostrarle que vivimos en, y no al margen de, lo que fue nuestra habla originaria, el mapudungun, el aimara, el quechua, el guaraní y muchas otras lenguas que emergen en nuestra forma de hablar y en la sonoridad de palabras como copiapo, chango, chuso, kuko, Vitacura y que vuelven, desde algún lugar que esta más allá y que, de alguna manera ya se ha vuelto desconocido para nosotros. Territorios, lugares lejanos e ignotos al que no podremos llevar a Donna. De todas formas, como dice nuestra lengua originaria ir hacia el origen es siempre ir al futuro en una circularidad que sabemos resulta bastante incomprensible para el pensamiento occidental. Bienvenida al español Donna.
Jaime Landa es Médico Psiquiatra de la Universidad de Chile. Psicoterapeuta Psicoanalítico adolescentes y adultos. Docente seminarios teóricos y clínicos Psicoanálisis Relacional.
Miembro IARPP CHILE. jimmylanda@gmail.com
